En este nuevo post continuamos hablando de estrategias de marketing directo. Hace unos meses hablábamos de buzoneo, si no sabéis de qué trata os invitamos a leerlo, en este hablaremos sobre el street marketing: qué es y cómo aplicarlo a nuestra estrategia funnel.
Street marketing como estrategia
Explicar qué es el street marketing es bastante sencillo si nos basamos en su traducción literal, es una acción o conjunto de acciones publicitarias que se realizan en la calle o lugares públicos generando impacto en el público. Seguro que habéis visto a personas repartiendo folletos, marquesinas, stand de promoción o espectáculos, entre otras acciones posibles de realizar. Pero el street marketing no se queda solo aquí, estas iniciativas tienen que tener un gran impacto sobre el usuario, generando una interacción entre la acción y el público.
Como ya hemos dicho, esta técnica no se queda solo en las típicas vallas o marquesinas, hay que ir un poco más allá, introducción acciones creativa e innovadoras. Se pueden realizar acciones en lugares o de formas que sorprendan al viandante y hagan que se genere un interés o una interacción con el producto, servicio o marca. Este tipo de estrategias pueden combinarse con otro tipo de estrategias, una buena opción son las redes sociales. Se puede generar un espacio donde poder realizar fotos y etiquetar a la marca o utilizar un hashtag para seguir el impacto de la campaña implementada.
Ventajas del street marketing
El street marketing cuenta con una serie de ventajas con respecto a otras técnicas de marketing. Ventajas:
- Permite un acercamiento directo con el público.
- Una campaña creativa puede generar un gran impacto, trayendo notoriedad a la marca.
- No se necesita un presupuesto estratosférico para diseñar una buena campaña a pie de calle.
- Se puede combinar con otro tipo de técnicas, incluidas las digitales.
- Son temporales, por lo que no cansa al público.
No existe una única estrategia de street marketing definida y diseñada para el éxito. Esto dependerá del tipo de campaña, del producto o servicio y de la marca. La misma campaña puede no funcionar para dos empresas dentro del mismo sector. Hay que buscar la estrategia perfecta para cada campaña y cliente.